El informe elaborado por el Instituto de la Empresa Familiar, en colaboración con la Red de Cátedras y SAFER, actualiza tras una década la radiografía de la empresa familiar en España.
Los resultados muestran que más del 92% de las compañías son familiares, responsables del 70% del empleo privado y del 57,8% del Valor Añadido Bruto. Aunque predominan las micro y pequeñas empresas, la investigación destaca que las empresas familiares presentan una tasa de supervivencia superior a las no familiares (77% frente a 71%) y que, pese a facturar menos, alcanzan mayores niveles de rentabilidad económica y financiera. Además, se subraya su relevancia territorial: en regiones como Baleares, Castilla y León o Galicia concentran más del 85% del empleo privado.
Se señalan también los desafíos estructurales para garantizar su continuidad. Entre ellos destacan el reducido tamaño medio de las empresas familiares, su menor presencia en sectores intensivos en tecnología y conocimiento, y el reto del relevo generacional: solo un tercio ha superado al menos una sucesión. No obstante, el análisis evidencia que las empresas familiares con mayor antigüedad, mayor tamaño y estructuras de propiedad más diversificadas son más productivas, rentables y con mayor propensión a la internacionalización. De esta forma, el informe plantea la necesidad de fomentar el crecimiento, la innovación y la digitalización como claves para asegurar su sostenibilidad futura.