Este barómetro proporciona una visión práctica para que empresas de distintos tamaños puedan navegar los desafíos actuales, optimizando recursos y aprovechando las oportunidades de innovación en un entorno global competitivo.
Se abordan tres temas clave: el impacto de la adversidad económica en los presupuestos de I+D, estrategias para maximizar los resultados de innovación y el uso creciente de ayudas y subvenciones frente a las deducciones fiscales. Además, se destaca el papel emergente de la inteligencia artificial en la transformación de los procesos de innovación y los retos asociados a la protección de la propiedad intelectual.
Entre las principales conclusiones, se observa una ligera recuperación en los presupuestos de I+D pese a la presión por reducir costos, con un creciente interés en tecnologías como la inteligencia artificial para optimizar procesos. Asimismo, el 37% de las empresas recurren a ayudas públicas, consolidándose como una fuente clave de financiación en un entorno financiero incierto. El informe también evidencia la necesidad de diversificar los equipos de innovación y proteger mejor las ideas frente al espionaje corporativo.