Este informe analiza en profundidad la carga tributaria que soportan las empresas en España en comparación con otros países de la OCDE y la Unión Europea. A través del nuevo indicador de Contribución Fiscal Empresarial Total, basado en datos de la Tax Foundation, el estudio revela que España se sitúa entre los países con mayor presión fiscal sobre el tejido empresarial, tanto en relación con el PIB (17,8%) como al Excedente Bruto de Explotación (41,6%). Este enfoque integral permite medir los impuestos directos y el de Sociedades, pero también los indirectos y los costes de cumplimiento normativo, destacando la complejidad del sistema fiscal español.
Se señala que el 89% de los ingresos fiscales en España provienen de tributos pagados o recaudados por empresas, lo que evidencia su rol central en el sostenimiento del sistema tributario. Sin embargo, esta elevada presión fiscal no se traduce necesariamente en una mayor recaudación efectiva, lo que sugiere ineficiencias estructurales. Además, se pone de relieve el impacto negativo sobre la inversión, el empleo y la competitividad, especialmente para las pymes, debido a los altos costes administrativos y a una menor flexibilidad en los incentivos fiscales respecto a otros países europeos.