Este documento destaca cómo el sector editorial español ha superado desafíos normativos y tecnológicos, consolidándose como un referente mundial en la educación, subrayando la necesidad de coordinación estatal en políticas educativas.
El curso 2022-2023 comenzó con retos significativos para el sector editorial debido a la implementación de la LOMLOE y la aprobación tardía de los nuevos currículos. Aunque hubo más estabilidad que el año anterior, la incertidumbre persistió, y las editoriales realizaron un gran esfuerzo económico para adaptar los libros a la normativa vigente. Este esfuerzo ha permitido la actualización de materiales educativos en todos los niveles, demostrando la capacidad del sector español de liderar en Latinoamérica y ofrecer herramientas didácticas de alta calidad, tanto analógicas como digitales.
La dispersión normativa entre las comunidades autónomas ha fragmentado el sistema educativo español, creando diferencias significativas en los currículos y sistemas de ayuda para libros de texto.