Este documento proporciona recomendaciones para el uso de un lenguaje que refleje la igualdad de género y evite expresiones sexistas en el ámbito administrativo y jurídico. Para ello, se fundamenta en diversas normativas y recomendaciones internacionales que promueven la comunicación no discriminatoria, como la Recomendación CM/REC 2019 del Consejo de Europa y la Ley Orgánica 3/2007 para la igualdad efectiva de mujeres y hombres. Además, destaca la importancia de garantizar que los documentos oficiales sean accesibles, claros y comprensibles para la ciudadanía.
La guía presenta estrategias prácticas para lograr un lenguaje más inclusivo, como el uso de términos neutros, la alternancia en el orden de referencias a hombres y mujeres, la feminización de nombres de cargos y profesiones, y el desdoblamiento ocasional de términos para visibilizar a ambos sexos. También se abordan recomendaciones para evitar errores de concordancia, el uso innecesario del masculino genérico y la aplicación de estructuras gramaticales más inclusivas sin afectar la claridad del mensaje.