Este informe presenta una guía para que los responsables políticos y empresarios optimicen sus sistemas tributarios, impulsando la competitividad económica y atrayendo tanto a inversores como a residentes.
El objetivo principal es proporcionar una herramienta para medir, evaluar y mejorar los sistemas fiscales, haciéndolos más atractivos y competitivos tanto a nivel regional como internacional. Se destaca como algunas comunidades, como Madrid, se posicionan entre las más competitivas.
Se resaltan las reformas recientes en varias regiones, como la eliminación de impuestos o la mejora de las deducciones, que han permitido a comunidades como Extremadura o La Rioja avanzar significativamente en el ranking. Además, se establece una comparativa internacional que revela que los impuestos sobre la renta, el patrimonio y las sucesiones en muchas regiones españolas son más altos que en otros países europeos, lo que puede afectar su competitividad global.