El documento analiza en profundidad los desajustes entre la oferta formativa y las necesidades reales del mercado laboral en España.
A través de una combinación de datos estadísticos y entrevistas a empresas de distintos sectores, el informe revela que más del 50% de las organizaciones tienen dificultades para cubrir vacantes por falta de competencias adecuadas, tanto técnicas como transversales. Las áreas con mayores carencias se localizan en TIC, industria, sanidad y construcción, donde se agrava la brecha entre formación existente y perfiles profesionales demandados.
Se subraya la urgencia de una estrategia nacional de empleabilidad basada en el aprendizaje continuo, la actualización ágil de los contenidos formativos (reskilling y upskilling) y la integración sistemática de la orientación profesional. Asimismo, destaca la importancia de reforzar la colaboración entre el sector educativo, el empresarial y las administraciones públicas para lograr una formación más flexible, adaptada y con impacto real en la empleabilidad. También se propone desarrollar un sistema de información que permita a ciudadanos y empresas identificar con claridad las habilidades con mayor proyección.