Este documento aporta una visión actualizada del sistema de salud español, destacando tanto sus fortalezas como los retos futuros, lo que lo convierte en una referencia para el desarrollo de políticas de salud basadas en la evidencia.
Se destaca que el Sistema Nacional de Salud ofrece cobertura universal y es financiado principalmente por impuestos, con competencias sanitarias descentralizadas hacia comunidades autónomas. Tras la pandemia de COVID-19, el gasto en salud ha aumentado, representando el 10,8% del PIB en 2021, y se ha implementado una serie de reformas para ampliar la cobertura de servicios y reducir los copagos, especialmente en productos farmacéuticos y prótesis.
El sistema de atención primaria sigue siendo el eje del SNS, con los médicos de familia actuando como gestores de acceso a cuidados especializados. Se menciona la escasez de profesionales en ciertas especialidades, particularmente en atención primaria y en áreas rurales, lo que plantea desafíos para el futuro.
Se resalta la necesidad de reformas para mejorar la eficiencia y acceso a ciertos servicios, como la atención dental y la salud mental. A pesar de los avances, persisten desigualdades socioeconómicas en la salud, y algunos factores de riesgo, como la obesidad infantil y el consumo de tabaco y alcohol, siguen siendo preocupaciones.